Japón comenzó el año con un fuerte terremoto y un tsunami que sacudieron el centro del país y su costa occidental.
El sismo de 7,6 de magnitud, provocó advertencias de evacuación a la población y dejó sin electricidad a miles de hogares, interrumpió los vuelos y los servicios ferroviarios a la región afectada.
El movimiento provocó olas de alrededor de 1 metro en algunas partes de la costa del mar de Japón y se espera una ola mayor, informó la cadena pública NHK.
La Agencia Meteorológica de Japón emitió alertas de tsunami para las prefecturas costeras de Ishikawa, Niigata y Toyama. Rusia también dió alertas de tsunami en sus ciudades de Vladivostok y Najodka, en el extremo oriental del país.
Fuente: Ámbito