Laura LozanoGrandes cadenas comerciales se plantaron frente a nuevas listas de precios con fuertes aumentos.
En un contexto de tensión entre proveedores y canales de venta, las principales cadenas de supermercados del país rechazaron este lunes la mercadería enviada por empresas como Unilever y Molinos con aumentos que oscilaban entre el 9% y el 12%. La decisión fue respaldada por el ministro de Economía, Luis Caputo, quien lo comunicó a través de su cuenta en X y destacó la medida como un freno ante prácticas que considera especulativas.
A la postura del Palacio de Hacienda se sumó la voz del subsecretario de Defensa del Consumidor y Lealtad Comercial, Fernando Muiño, quien afirmó que “no existen razones tributarias ni cambiarias” que justifiquen estas subas. “No hay lugar para oportunistas”, subrayó, dejando en claro que el Gobierno no permitirá aumentos injustificados que perjudiquen al consumidor final.
Por su parte, la Asociación de Supermercados Unidos (ASU) emitió un comunicado ratificando su compromiso con los consumidores y rechazando listas de precios que incluyan incrementos considerados “desmedidos o especulativos”. La entidad aseguró que su objetivo principal sigue siendo ofrecer productos de calidad al mejor precio posible.
En diálogo con medios nacionales, el director ejecutivo de ASU, Juan Vasco Martínez, confirmó que varias empresas aceiteras, entre ellas Molinos Río de la Plata, AGD, Molino Cañuelas y Bunge, adelantaron listas con subas cercanas al 9%. La reacción de las cadenas fue inmediata: no aceptar esa mercadería bajo esas condiciones.
La tensión por los precios se suma a un clima de incertidumbre económica, donde el Gobierno sostiene que “los precios determinan los costos” y no al revés. En un tono provocador, el presidente Javier Milei respaldó el rechazo a los aumentos con una frase polémica que volvió a sacudir el debate sobre la formación de precios en el país.
Jujuy A Diario
Andrea M. Cabrera
