Ritual de la Pachamama: la guía completa de precios y cómo sahumar paso a paso

Con la llegada del mes más espiritual del año, miles de jujeños se preparan para honrar a la Madre Tierra con fuego, aromas y gratitud.

Como cada año, agosto llega con el llamado de la Pachamama y en Jujuy ya se respira copal, ruda y yuyos sagrados. El 1° de agosto marca el inicio del calendario agrícola andino y es el momento elegido para sahumar, agradecer y renovar la energía en hogares, comercios y espacios comunitarios. La tradición —que hunde sus raíces en la cosmovisión prehispánica— se mantiene vigente en toda la región y se fortalece con el paso del tiempo, traspasando generaciones.

¿Cuánto cuesta sahumar en este 2025?

Según un relevamiento realizado en la zona de la vieja terminal de San Salvador de Jujuy, los precios para preparar el sahumado este año oscilan entre los $10.000 y $15.000, dependiendo de los elementos elegidos. La mayoría de las vendedoras aseguran que los valores se mantuvieron similares al año pasado. Entre las opciones más buscadas figuran el atado de ruda, el incienso, copal, carbón vegetal y ofrendas secas para el ritual. Todo se vende en combos armados o por separado.

El paso a paso del sahumado

• Preparar los elementos del sahumado: Necesitarás un brasero o recipiente resistente al calor, carbón vegetal, un fósforo o encendedor, y hierbas aromáticas como ruda, incienso, copal o yuyos secos. También podés sumar alimentos o bebidas como ofrendas (coca, chicha, vino, yerba, entre otros).
• Encender el carbón: Se prende el carbón en el brasero hasta que esté al rojo vivo. Es importante hacerlo con tiempo y en un espacio ventilado.
• Colocar las hierbas sobre el carbón encendido: Una vez que el carbón esté listo, se colocan las hierbas elegidas encima. El humo comenzará a desprenderse casi de inmediato.
• Iniciar el sahumado desde adentro hacia afuera: Se comienza por el interior de la casa o espacio que se desea limpiar. Se pasa el brasero por cada habitación, haciendo movimientos circulares o lentos, permitiendo que el humo penetre en cada rincón.
• Dirigirse hacia la puerta de entrada: El recorrido finaliza en la entrada principal, empujando simbólicamente las energías negativas hacia afuera y dejando espacio para lo nuevo.
• Acompañar con palabras o pensamientos de gratitud: Mientras se sahuma, se pueden pronunciar frases de agradecimiento o peticiones hacia la Pachamama. Es un momento íntimo y de conexión.
• Realizar el enterrado u ofrenda final (opcional): Muchas personas completan el ritual enterrando ofrendas en la tierra, como forma de cerrar el ciclo y devolverle algo a la Madre Tierra.

Si bien Jujuy es considerada la Capital Nacional de la Pachamama por ley, otras provincias del NOA también conservan esta práctica: en Salta, Tucumán y Catamarca, cada 1º de agosto se realizan ceremonias en comunidades rurales y centros urbanos. Es un momento de encuentro, memoria y espiritualidad colectiva, que trasciende credos y reúne a pueblos enteros bajo una misma intención: agradecer y pedir por lo que vendrá.