Laura LozanoEl Klyuchevskaya se activó pocas horas después del potente terremoto que sacudió el extremo oriente ruso.
La situación en la península rusa de Kamchatka se volvió aún más crítica este miércoles, cuando el volcán Klyuchevskaya, el más alto y activo de Eurasia, entró en erupción luego del terremoto de magnitud 8.8 que golpeó la región. El fenómeno sísmico, considerado uno de los más intensos desde 1952, ya había disparado alertas de tsunami a lo largo del Pacífico.
Según reportes del Servicio Geofísico de la Academia de Ciencias de Rusia, la violenta sacudida subterránea actuó como detonante de la erupción, que comenzó con explosiones intensas y eyección de lava por la ladera occidental del volcán. Las imágenes registradas muestran una impactante columna de humo elevándose sobre el cráter y ríos de magma deslizándose por la montaña.
El Klyuchevskaya se eleva a más de 4.750 metros sobre el nivel del mar, siendo una de las estructuras volcánicas más imponentes del planeta. Su cráter principal alcanza los 700 metros de diámetro y sus flancos están salpicados por decenas de conos secundarios. Esta no es la primera vez que el gigante entra en actividad, pero la combinación con un evento sísmico tan severo genera un riesgo adicional.
La localidad de Klyuchi, situada a apenas 30 kilómetros del volcán, encabeza las zonas de mayor preocupación. Allí viven unas 4.500 personas, muchas de las cuales ya habían sufrido daños materiales y cortes de servicios a raíz del terremoto y sus réplicas. Las autoridades locales reforzaron los protocolos de emergencia ante la amenaza combinada.
Mientras tanto, los organismos internacionales de monitoreo volcánico y sísmico siguen de cerca el desarrollo de la actividad en Kamchatka, una región de alta vulnerabilidad geológica. Por el momento, no se han confirmado víctimas fatales, pero el panorama sigue siendo incierto.
Jujuy A Diario
Andrea M. Cabrera
