Hay personas que son una inspiración y nos permiten creer que todo es posible si lo intentamos, y ese es el caso de Lucio: Un bombero voluntario de Córdoba que debió apagar un incendio e inmediatamente dar un examen virtual desde un banco de la Plaza del pueblo.
La historia de este joven es casi de película: Lucio Malatini miró el reloj y se dio cuenta de que en pocos minutos debía dar un parcial virtual de Fruticultura para el 4° año de la carrera de Agronomía que cursa en la Universidad Nacional de Córdoba.
Este se encontraba en la cima de la montaña, en donde no había señal para su celular, entonces decidió bajar al pueblo de Caminiaga, donde los incendios de los últimos días causaron tres víctimas fatales, a buscar el salvador Wi-Fi que lo sacara del apuro. Después de toda una jornada de “guardia de ceniza”, este bombero voluntario de 24 años oriundo de General Deheza, 210 kilómetros de Córdoba capital, quería rendir su examen.
Para colmo, en el pueblo tampoco tenía internet. “Empecé a preguntarle a la gente del lugar, en las casas, y me dijeron que solo había Wi-Fi en la plaza del pueblo. Entonces me fui para allí, pero mi celular se había quedado sin batería”, dijo Malatini.
“Entonces un compañero me presta su teléfono. Y finalmente me pude conectar. Estaba un poco lenta la conexión, pero pude rendir y me fue bien”, contó.
De esta manera pudo cumplir con sus dos deberes, el de trabajo y el educativo. Realmente, todo un ejemplo digno de admirar.
Fuente: El 10 TV.