JUJUY A DIARIO

Un testimonio explosivo reaviva el misterio del joven enterrado en Coghlan hace décadas

Un testimonio explosivo sacude la investigación sobre la desaparición de un adolescente en 1984, avivando el misterio.

El caso de Diego Fernández Lima, el joven de 16 años cuyos restos fueron hallados enterrados en el barrio porteño de Coghlan tras más de cuatro décadas, dio un vuelco con las declaraciones de Adrián, un excompañero de la víctima.

En una entrevista televisiva, Adrián lanzó una grave acusación: “Diego intentó violarme en el baño del colegio. Yo estaba en segundo año, tenía 14 y él era un año más grande”. Este relato, que aún debe ser formalizado ante la Justicia para tener validez penal, pinta un retrato inquietante del adolescente fallecido y agrega una nueva dimensión a la investigación que busca esclarecer un crimen que marcó a toda una comunidad.

Diego Fernández Lima y Cristian Graf eran compañeros de curso en la misma institución

El ambiente escolar era problemático

Adrián conoció a Fernández Lima y a Cristian Graf, hoy principal sospechoso, en la Escuela Nacional de Educación Técnica N° 36, ubicada por entonces en Ballivián y Donato Álvarez. “Era un colegio que recibía chicos repetidores y echados de otros colegios, éramos un colegio bastante complicado”, recordó. En ese contexto, describió a Diego como “bastante problemático” y propenso a enfrentamientos, incluso con Graf, apodado “Jirafa” por su altura.

Sobre el episodio que lo marcó, Adrián confesó: “En esa situación se quiso aprovechar de mí y no sé cómo hice, pero logré sacarlo de encima”. Años después, con ayuda psicológica, pudo procesar el trauma, que mantuvo en secreto hasta hace poco: “Eso mis viejos nunca lo supieron, se enteraron hace poco”.

La lucha por la verdad

El hallazgo de los restos de Fernández Lima en mayo de este año, en una vivienda de la calle Congreso 3742, reabrió un caso que parecía olvidado. Aunque el homicidio ya prescribió, la Fiscalía Nacional en lo Criminal y Correccional N° 61, a cargo de Martín López Perrando, avanza en un “juicio por la verdad” para reconstruir los hechos.

Adrián, quien dejó la escuela tras la desaparición de Diego en 1984, recordó la conmoción: “Salió en todos lados que desapareció, era vox populi”. Mientras, Javier Fernández Lima, hermano de la víctima, impulsa la “Ley Diego” para extender los plazos de prescripción en casos de desapariciones.

El testimonio de Adrián, aunque no está en el expediente, podría arrojar luz sobre el entorno del joven y mantener viva la búsqueda de respuestas en un caso que sigue resonando en Coghlan.

Laura Lozano

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