Tradición San Francisco: Legado de las Yungas y orígenes de la arqueología en el Norte

Durante el mes de noviembre se llevó a cabo una muestra “Imágenes del pasado”, que buscaba mostrar el legado cultural de las comunidades precolombinas a través de la alfarería de las Yungas y sus orígenes.

Si bien esta muestra ya terminó Diego Alfaro, Antropólogo, visitó nuestro programa de streaming “Hiperconectados”, donde explicó el origen de la alfarería en Jujuy y la historia de la Tradición San Francisco.

De acuerdo a lo que explicó, hace aproximadamente 2.000 años, en el oriente de Jujuy existió una sociedad notable por sus manifestaciones cerámicas, consideradas entre las más antiguas y representativas de toda la provincia y del noroeste argentino.

“Unos arqueólogos suecos realizaron hallazgos de cerámica en las orillas del Río San Francisco, que determinaron  a esta cultura. Posteriormente se volvió a investigar la zona y, debido a la vegetación y poca preservación, con el tiempo algunos restos se degradaron”, explicó.

Continuando con la historia relató que desde los 90 Gabriel Ortiz y el equipo de investigación del que forma parte Alfaro, comenzó a investigar sistemáticamente esta zona y “se descubre que esta tradición es de una sociedad que existió hace mas de 2000 años en las Yungas, y una de sus características es la cerámica, siendo la evidencia mas temprana en el norte argentino”, indicó.

Respecto a estas investigaciones, destacó que “a los arqueólogos la cerámica les da mucha información, porque a partir de un elemento se puede reconocer a qué grupo pertenecían, el modo de vida de las poblaciones, ya que no tenían un sistema de escritura que hayan dejado, pero tenían este sistema de información que surge cuando la sociedad cambia, dejan de ser cazadoras  recolectoras y empiezan a ser mas sedentarias, en ese momento se amplía y empieza a usar, por eso cumple usos práctico, pero también para usos simbólicos, para transmitir mensajes hablar de la identidad del grupo”.

Asimismo, destacó los diseños de estos grupos, y algo que los caracterizaba eran las pipas de fumar que “eran piezas únicas, que combinaban rasgos animales con humanos, y que además tienen lenguaje  visual con diseños que tienen algo en común y es que todas tienen las manos en el pecho, representación genital masculina y están sentados. Por lo que sabemos, en las yungas la posición de estar sentados tiene que ver con el poder y la jerarquía, y al representarse hombres interpretamos que había una división de genero y que los encargados de usar estas pipas eran “, explicó.

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