Se trata de José Luís Marino Rótolos, condenado por la justicia salteña por el crimen de un cambista en el 2016. Se realiza un fuerte operativo cerrojo para dar con el fugitivo.
En la mañana del lunes dieron a conocer que José Luis Marino Rótolos, quien debía cumplir condena perpetua en el penal de Alto Comedero, se fugó y se montó un operativo con todas las fuerzas para hallarlo.
Según las fuentes que fueron consultadas por El Tribuno de Jujuy, alrededor de las 6 Marino Rótolos pidió permiso a sus celadores para ir hasta la panadería interna a retirar las piezas de pan, para él y sus compañeros.
Para llegar allí, tuvo que atravesar varias compuertas de rejas que están permanentemente custodiadas. De regreso tomó la parte lateral del predio, cruzó literalmente una cancha de rugby y detrás de un árbol de eucalipto, huyó por una abertura del alambrado, perfectamente cortada, sin que nadie se percatara del ardid que evidentemente había planeado hace tiempo.
Los efectivos policiales tomaron conocimiento a las 8.30 que Marino Rótolos se había fugado por la parte trasera de la morgue del Poder Judicial sobre la ruta nacional Nº 9 y de inmediato alertaron a los efectivos de la Brigada de Investigaciones.
Si bien todo gira alrededor de un estricto hermetismo, se pudo saber que el Departamento de Criminalística analizó el lugar de fuga y observaron el corte del alambrado tipo San Martín con un alicate y todo apunta que personas externas habrían preparado la fuga.
Asesinó al cambista jujeño Marcos Ortega
José Luis Marino Rótolos fue considerado el mentor y organizador del robo seguido de muerte del cambista jujeño Marcos Ortega en el 2013.
El cuerpo fue hallado en el kilómetro 1640 de la Ruta 9 el día 4 de abril de 2013. Tenía varios impactos de bala en su cabeza, y días antes se había descubierto poco antes del puente de La Caldera un automóvil marca Audi incendiado y que había sido denunciado como robado en Buenos Aires.
Jujuy A Diario
Andrea M. Cabrera
Laura Lozano
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