Los galardones a la producción audiovisual se entregaron en el marco de una ceremonia fastuosa que recuperó el brillo de las ediciones previas a la pandemia.
“Succession”, la surcoreana “El juego del calamar” y “The White Lotus” fueron los grandes triunfadores de los premios Emmy, que regresaron este año con una fastuosa ceremonia en Los Ángeles luego de dos ediciones reducidas por la pandemia.
“Esta ha sido una gran semana de sucesiones”, dijo refiriéndose al fallecimiento de la reina Isabel II el creador de “Succession”, Jesse Armstrong, al aceptar el Emmy a la mejor serie dramática, el mayor premio de la noche del lunes. Armstrong también conquistó el premio a mejor escritor de serie dramática.
La producción de HBO sobre los ambiciosos miembros de una familia que luchan entre sí dominaba la competencia con 25 nominaciones, y se alzó con cuatro estatuillas, entre las que también destaca mejor actor de reparto dramático para Matthew Macfadyen.
HBO vivió una excelente noche. Además del triunfo de “Succession”, su popular miniserie “The White Lotus”, que sigue los dramas de un grupo de ricos turistas en un paradisíaco hotel de lujo, dominó cuantitativamente al hacerse con diez premios, incluyendo mejor miniserie y actriz y actor de reparto que fueron para la carismática Jennifer Coolidge y Murray Bartlett, respectivamente.
El éxito mundial “El juego del calamar” arrasó en seis categorías, entre ellas mejor mejor director (Hwang Dong-hyuk) y actor con Lee Jung-jae, el primero de habla no inglesa en llevarse esta victoria.