Desde JujuyADiario te proponemos un juego casero, muy creativo y con pocos materiales que seguro va a encantar a los peques: “El juego del monstruo dibujado”. Es sencillo, divertido y fomenta la imaginación y la colaboración.
¿Qué necesitas?
Hojas de papel (pueden ser hojas blancas normales o recicladas)
lápices, bolígrafos o rotuladores de colores
¿Cómo se hace?
Cada niño o persona que participe debe tener una hoja.
El primero dibuja la cabeza de un monstruo o personaje inventado, nada complicado, solo la parte superior (puede ser una cara divertida o terrorífica, como quieran)
Luego dobla la hoja para ocultar la cabeza y solo deja visible un poco del cuello.
La hoja se pasa al siguiente jugador, que hará el dibujo del torso y los brazos sin mirar lo que está arriba.
Se vuelve a doblar la hoja dejando a la vista solo un poco del borde inferior del torso.
El siguiente dibuja las piernas y los pies.
Finalmente, todos despliegan sus hojas y ven los monstruos locos y creativos que han salido, donde cada parte fue dibujada por una persona diferente.
¿Por qué este juego es genial?
Este juego es muy creativo porque nadie sabe qué parte va a dibujar el otro, y los resultados son siempre sorpresivos y divertidos. Además, solo necesitas papel y algo para dibujar, ¡y puedes hacerlo en cualquier lugar! Además, es un juego con lenguaje muy coloquial que invita a la risa y a la colaboración sin reglas complicadas.
Perfecto para estimular la imaginación y hacer reír a todos, además de aprender a trabajar en equipo mientras se pasa un rato divertido.
Este juego está basado en la idea del “monstruo descompuesto” o “dibujos encadenados” y es muy popular en actividades infantiles por su sencillez y la creatividad que genera.