El defensor del Barcelona, Gerard Piqué, anunció el fin a su carrera a los 35 años. Más allá del impacto mediático que generó su escandalosa separación de Shakira, los roces y las diferencias en el Camp Nou se habían transformado en moneda corriente.
Según trascendió, en una reunión entre Piqué y el DT Xavi Hernández, el jugador le habría dicho este verano “yo me quedo a pelearla y todos esos fichajes que trajeron van a quedar atrás porque el puesto de titular me lo voy a quedar yo, que soy mucho mejor que ellos. Y lo sabes bien”

A lo que el Director Técnico le habría comunicado que “no lo tenía en sus planes y le sugirió que se buscara club”
Piqué repitió dos conceptos que mantuvo desde hace años: Que no jugaría en ningún otro equipo que no fuera el Fútbol Club Barcelona por falta de motivación, y que regresará al club catalán, seguramente con la intención de ser presidente en el futuro.
Esta idea que viene de lejos en Piqué y su excesivo protagonismo nunca gustaron al entrenador, Xavi Hernández, de quien la junta directiva del Barcelona, cansada con la exposición del defensor, dudaba sobre si sería capaz, especialmente desde esta temporada y con los nuevos refuerzos, de cargarse a sus excompañeros Sergio Busquets y Jordi Alba, dado que los directivos consideran que ya han cumplido un ciclo y no sólo eso, sino que cobran demasiado dinero, mucho más de lo que se paga en el mercado del fútbol español.
Fuente: Infobae.