El pasado miércoles falleció a los 100 años el exsecretario de Estado de Estados Unidos Henry Kissinger, considerado una figura clave de la diplomacia estadounidense en la era posterior a la Segunda Guerra Mundial.
Kissinger Associates anunció en un comunicado: “El Dr. Henry Kissinger, un respetado académico y estadista estadounidense, murió hoy en su residencia en Connecticut”.
Su vida estuvo marcada por algunos hitos en las relaciones de Washington con el mundo y también por el respaldo que le dio a la represión desplegada por las dictaduras en América latina, incluso en la Argentina, país que visitó durante el Mundial 78, cuando se reunió con los integrantes de la Junta Militar que había tomado el gobierno dos años antes.
“Si hay cosas que tienen que hacerse, tienen que hacerlo rápido. Pero deberían volver rápidamente a los procedimientos normales”, le dijo Kissinger al primer canciller argentino de aquel entonces, el almirante César Augusto Guzzetti, durante una reunión el 10 de junio de 1976 en Santiago de Chile.
También se reveló que impulsó el golpe que derrocó al presidente Salvador Allende en Chile y dio lugar a la prolongada dictadura que encabezó el general Augusto Pinochet (1973-90).
Según desclasificados por la Casa Blanca registraron una conversación entre Pinochet y Kissinger en Santiago, Chile, en 1976, y demostraron que el estadounidense presionó desde 1971 a favor del golpe a Allende.
Cuando Pinochet fue detenido en Londres en 1998, el juez español Baltasar Garzón pidió interrogar a Kissinger por su supuesta responsabilidad en el Plan Cóndor, la coordinación de las dictaduras sudamericanas de fines de los 70 y principios de los 80 para detener y matar opositores, pero el Reino Unido negó esa posibilidad.
Fuente: Ámbito y La Nación