El gobierno nacional y un grupo de mandatarios provinciales acordaron ayer no acatar el fallo de la Corte Suprema de Justicia que restituyó fondos de la coparticipación a la ciudad de Buenos Aires.
La postura de la Casa Rosada fue influenciada directamente por los gobernadores del PJ, que durante horas estuvieron reunidos con el presidente Alberto Fernández, algunos en forma presencial y otros de manera virtual. En especial, primó el reclamo del mandatario chaqueño, Jorge Capitanich, que exigió desconocer la sentencia del máximo tribunal.
Al conocerse el comunicado con la decisión de Fernández y 14 mandatarios provinciales que asistieron a la reunión en Casa Rosada y subieron la tensión con una decisión de enorme voltaje político cuyas consecuencias son aún desconocidas. En el mensaje se consideró al fallo como “inédito, incongruente y de imposible cumplimiento”.
Además, acusaron al máximo tribunal del país de no haber fundado “el modo por el cual construye dicho monto, decide aumentar ese porcentaje (de la coparticipación para la Ciudad) al 2,95; es decir, le otorga a la Ciudad de Buenos Aires más de 180.000 millones de pesos adicionales a los que ya percibe”.
El descargo de Macri contra Fernández
Luego del comunicado, el expresidente Mauricio Macri decidió descargarse a través de su cuenta de Twitter “el presidente Alberto Fernández ordenó incumplir el fallo de la Corte Suprema de Justicia. No hay antecedentes en la historia argentina de un desconocimiento tan grave de otro poder del Estado”
Continúo “las sentencias no se discuten, se cumplen. La desobediencia de una sentencia de la Corte Suprema destruiría la continuidad jurídica de la Nación y nos expondría a la anarquía”
“Cuando a fines de 2015, apenas habíamos asumido, la Corte dictó un fallo millonario por coparticipación, no busqué excusas, y mucho menos embarqué al país en una crisis institucional. Confiamos en la Justicia” finalizó.
Fuente: La Nación.