Este martes se llevó a cabo la tradicional procesión en honor a la Virgen de Río Blanco y Paypaya, patrona venerada en la provincia. La celebración central recorrió las principales calles de San Salvador de Jujuy, convocando a numerosos fieles y devotos que acompañaron con fervor y expresiones de fe a la imagen sagrada. Esta procesión es el evento anual que reúne tanto a vecinos como a turistas, quienes participan de la manifestación religiosa y cultural que representa esta festividad.
Durante el recorrido, la comunidad mostró un profundo respeto y recogimiento, adornando las calles con flores y altares improvisados. Además, la imagen de la Virgen fue cargada en andas tradicionales, seguida por sacerdotes, grupos de músicos y danzas típicas que enriquecieron el acto con un fuerte sentido de identidad regional. La devoción popular marcó el ritmo de la procesión, que avanzó en un ambiente de celebración y recogimiento espiritual.



En la oportunidad, el gobernador de Jujuy, Carlos Sadir, participó activamente del acontecimiento, acompañado por autoridades locales y representantes de distintas instituciones. La presencia del mandatario provincial resaltó la importancia que tiene esta festividad para la identidad cultural y religiosa de los jujeños. En sus palabras, Sadir destacó el valor de mantener vivas las tradiciones y el sentido de comunidad que esta celebración fomenta en la región.
Concluida la procesión, tuvo lugar una misa solemne en la Catedral de Jujuy, donde se realizó una ceremonia en honor a la Virgen presidida por el Obispo César Daniel Fernández. La celebración eucarística contó con la participación de un gran número de fieles y autoridades, quienes reafirmaron su fe y compromiso espiritual. Este acto litúrgico cerró una jornada muy significativa para toda la provincia, que renueva cada año su devoción hacia la patrona de la región.













