Julián Martínez, es un fotógrafo y mago jujeño que vive en Bolivia y la rompe con sus dos pasiones.
El jujeño relató en nuestro programa de streaming “Hiperconectados” como lleva su estadía en el vecino país y destacó que “es difícil emigrar y estar lejos de los amigos y la familia” y señaló que “Jujuy tiene esa magia de decir ‘me voy al norte’, las tortillas rellenas, los tamales, empanadas, el ir al centro y comprarte un sándwich de pebete, algo que lo tomás como algo normal, detalles que hacen la diferencia”.
Cómo lo recibieron en Bolivia
“La cultura bolviana es diversa”, señaló refieriéndose a los distintos lugares del país, “hay gente amigable y divertida, que sin conocerte te abre las puertas de su casa, pero también hay gente más fría” y aprovechó para recordar a “Pepe”, la persona que lo guió en su llegada al país.
En lo que respecta a su llegada a Bolivia, específicamente a la ciudad de Santa Cruz, relató que sus padres habían visitado el lugar antes de su nacimiento, y finalmente el decidió ir a conocer, “vine sin expectativa y me termine sorprendiendo”, expresó.
Continuando con esto, dijo que en primer lugar, el viaje fue una propuesta de su papá “me dijo que podía venir a Bolivia, que no era lo que pensaba, vimos cosas en YouTube y yo en ese momento estaba por hacer fotografía en un crucero, no se dio y terminé llegando a Santa Cruz a probar surte”, relató.
En lo que respecta a sus trabajos como mago y fotógrafo, manifestó que le está yendo bien en ambos, “lo que vengas a hacer e Bolivia, funciona, hay movimiento, hay demanda, a mi en la magia me está yendo bien, estoy viajando por todos lados y con posibilidades de viajar a México y lo mismo con la fotografía”, expresó.
Para conocer más a Julián, pueden encontrarlo en las redes sociales, en TikTok o Instagram como @mago_rafoma o en su cuenta de fotografía @rafoma_ph.
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