Teherán acusó a Estados Unidos de haber iniciado un conflicto abierto y prometió una respuesta con consecuencias impredecibles.
El gobierno de Irán advirtió este lunes que responderá de forma “grave e impredecible” al ataque aéreo que Estados Unidos lanzó contra sus instalaciones nucleares el fin de semana. El vocero de las Fuerzas Armadas, teniente coronel Ebrahim Zolfaghari, aseguró que estos bombardeos “marcan el inicio de una guerra directa” y responsabilizó al expresidente Donald Trump de haber iniciado la ofensiva: “Tú empezaste esta guerra, pero la acabaremos nosotros”, afirmó en un mensaje difundido por la televisión estatal.
Los bombardeos, que alcanzaron complejos estratégicos como Fordow, Natanz e Isfahán, se enmarcan en el creciente conflicto que enfrenta a Irán con Israel desde el 13 de junio. La ofensiva dejó hasta el momento un saldo de al menos 430 muertos y más de 3.500 heridos en territorio iraní, en su mayoría civiles. En Israel, se confirmaron 24 víctimas fatales. Esta fue la primera intervención militar directa de Estados Unidos en el conflicto.

Zolfaghari sostuvo que la acción norteamericana constituye una “violación del suelo sagrado de Irán” y una agresión directa a su soberanía nacional. Aunque no brindó detalles sobre la respuesta militar que se prepara, afirmó que será proporcional y advirtió que la guerra podría extenderse en toda la región. “Los combatientes del islam infligirán consecuencias serias e impredecibles”, remarcó.
En este contexto, el ministro de Relaciones Exteriores iraní, Abás Araqchi, viajó a Moscú para mantener un encuentro urgente con el presidente Vladimir Putin. Desde el Kremlin condenaron el ataque de Washington y reiteraron su voluntad de actuar como mediadores, aunque su neutralidad es cuestionada por la Unión Europea. Rusia e Irán firmaron en enero un tratado de cooperación estratégica, con fuerte énfasis en el plano militar.