El presidente Javier Milei ordenó la desclasificación de toda la documentación vinculada al accionar de las Fuerzas Armadas durante la última dictadura. Además, se reconoció el atentado contra el capitán Humberto Viola como un crimen de lesa humanidad.
En su intervención, el vocero presidencial, Manuel Adorni, detalló que la decisión implica el traspaso de los archivos de la Secretaría de Inteligencia del Estado (SIDE) al Archivo General de la Nación, permitiendo que la documentación relacionada con los crímenes de la dictadura sea finalmente accesible al público. “Durante décadas, los archivos en manos de la SIDE permanecieron en las sombras. Solo los gobiernos de turno tuvieron acceso a esta información secreta”, afirmó Adorni, añadiendo que esta acción busca poner fin a lo que consideró un uso político de la documentación por parte de los gobiernos anteriores.
Además, Adorni anunció que el Gobierno reconocerá oficialmente ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos que el atentado que acabó con la vida del capitán Humberto Viola y su hija María Cristina, perpetrado por el Ejército Revolucionario del Pueblo (ERP) en 1974, será considerado un crimen de lesa humanidad. La medida, que busca revisar aspectos oscuros de la historia reciente, abre el debate sobre los límites de la justicia histórica y la responsabilidad estatal en los crímenes cometidos durante la dictadura.
La desclasificación de documentos, aunque vista como un avance en materia de memoria histórica, también ha suscitado preguntas sobre la utilidad real de la información desvelada y los fines que perseguirán las futuras investigaciones.