El descargo de Maxi “El Brother”, el representante de L-Gante

Mediante sus redes sociales Maxi El Brother, el representante de L-Gante, se expresó ante la situación en la que se encuentra el artista referente de la cumbia 420.

El mes pasado y lo que empieza de agosto, son los días más tensos, complicados e inciertos para el artista. Hace un mes, lo acusaron de amenazar con un arma y mantener cautivo a un vecino de su familia tras una pelea en una discoteca. De ahí, fue detenido en la cuál, continuó creando música.

Su representante se cansó y salió a defenderlo como tantas veces y esto fue lo que escribió en su perfil de Instagram:

“El odio contra L-Gante es un odio de clase, racista, antes que por la propuesta estética que sostiene desde su música y puesta en escena. No se bancan que el pibe venga de un barrio humilde. Lo quieren ver mal: robando y en situaciones de marginalidad o pobreza.

Del mismo modo que existe el gerontoodio o la gerontofobia, también existe el odio hacia lajuventud.

Un tema aparte son los consumos problemáticos y situaciones de marginalidad que habitan en sus letras. Tienen que comprender que la corrección política en cualquier arte nivela para abajo la calidad de lo que se consume a nivel cultural.

Hoy la onda es ir contra L-Gante y antes fue contra los distintos exponentes de la cultura popular.

La historia de la música está llena de de este tipo de situaciones: discriminaciones, cancelaciones ycensuras.

Tenemos que abrir la mente y empezar a convivircon los gustos musicales ajenos.

L-Gante no se subió a ningún pony.Colabora activamente con comedores de barrios populares y asentamientos y por si fuera poco hace un show gratuito para la gente sin costo para el estado para 65.000 personas en Tecnópolis, reuniendo familias completas con hijos e hijas disfrutando de él cantando su repertorio de 2hs.

Elián es el pueblo y allí late la más maravillosa música: la de los olvidados, los nadies, los pobres, los que subsisten pero que tienen todo el derecho del mundo a hacer arte para sublimar sus dolores y sufrimientos que son muchos.

No es muy diferente del odio de clase que tenía laoligarquía sobre las actrices de radioteatro, teatro y televisión.

Todo lo que no caiga en los cánones de belleza delas clases privilegiadas es tildado de desubicado y de moral dudosa.

L-Gante habla, entonces, de una realidad tangible es una pequeña victoria sobre todos esos avasallamientos, por parte de los mismos Clasistas que lo ven como una afrenta moral a su visión.

L-Gante es un símbolo.

Vosotros somos las metáforas que crecimos en la marginalidad y ahora queremos mostrar matices que llenen de felicidad y belleza las caras de los nenes y nenas a los que les falta de todo”.