Apareció desnudo en Google Maps y ahora recibirá una millonaria indemnización

Una imagen captada en su patio lo dejó expuesto ante todo el pueblo. La Justicia le dio la razón.

Todo comenzó en 2017, cuando un hombre de Bragado, provincia de Buenos Aires, apareció completamente desnudo en una imagen de Google Street View. Estaba en el patio de su casa, de espaldas, aparentemente tranquilo y sin saber que una cámara estaba registrando ese instante. La escena fue publicada, viralizada por los medios y llegó hasta la televisión. Lo que siguió fue un derrotero judicial que esta semana dio un giro inesperado: Google deberá pagarle más de 16 millones de pesos por haber violado su derecho a la intimidad.

La imagen, según relataron en el expediente, fue vista por el propio damnificado en un noticiero. Desde ese momento, las bromas no pararon. Vecinos, conocidos e incluso compañeros de trabajo —el hombre es policía— lo reconocieron pese a que la fotografía no mostraba su rostro. La dirección de la vivienda era suficiente. “Me replegué, salía solo para trabajar”, declaró en la causa. Lo que parecía un error técnico, terminó dañando su imagen pública y su estabilidad emocional.

En primera instancia, el juez Eduardo Caruso desestimó la demanda con comentarios irónicos: sostuvo que el hombre no estaba en “el Jardín del Edén” y que el problema lo habían tenido sus vecinos. Incluso lo acusó de buscar un rédito económico. Pero la Cámara de Apelaciones entendió lo contrario. Los jueces señalaron que el caso implicaba un claro choque entre la libertad de información y el derecho a la privacidad, y fallaron a favor del damnificado. Según los camaristas, la publicación fue una violación evidente del artículo 19 de la Constitución Nacional.

Google intentó defenderse argumentando que no se veía el rostro del hombre, pero los jueces remarcaron que sí podía identificarse el lugar, lo que hacía reconocible al protagonista. Se basaron en el artículo 1757 del Código Civil y Comercial, que establece responsabilidad por daño en actividades riesgosas, y recordaron que cumplir con protocolos no exime de esa responsabilidad. Además, ordenaron que la imagen se elimine de inmediato y aplicaron una multa de $100.000 diarios mientras siga publicada.

La cifra que deberá pagar Google supera los 16 millones y medio de pesos, al sumar intereses desde 2017. El fallo dejó absueltos al medio periodístico y al canal de cable que difundieron la imagen, pero dejó en claro un mensaje potente: en la era digital, los gigantes tecnológicos también deben rendir cuentas por el daño que causan.