Con la llegada de la primavera, Jujuy se llena de color y sabor gracias a la amplia variedad de frutas y verduras de estación que comienzan a aparecer en los mercados locales. Comprar, cocinar y consumir estos productos no solo ofrece beneficios para la salud, sino que también es una estrategia efectiva para reducir el costo de la canasta básica alimentaria. Apostar por las frutas y verduras de temporada permite acceder a alimentos frescos, nutritivos y más económicos.
Las estrellas de la temporada
Entre las frutas de estación que destacan en Jujuy durante la primavera se encuentran las frutillas, duraznos, naranjas, y ciruelas. Estas frutas, cultivadas localmente, no solo son más frescas y sabrosas, sino que también suelen tener precios más accesibles en comparación con productos fuera de temporada que requieren transporte desde otras regiones. En cuanto a las verduras, la primavera trae una abundancia de zapallitos, lechugas, espinacas, zanahorias, y remolachas, ingredientes versátiles que pueden formar la base de numerosos platos saludables.
Aprovechar las frutas y verduras de estación permite crear menús variados y nutritivos sin salir del presupuesto. Un ejemplo puede ser una ensalada fresca de espinacas y zanahorias, acompañada de un puré de zapallo y remolacha asada, platos que no solo son saludables sino también coloridos y atractivos. Para el postre, una simple pero deliciosa compota de duraznos o frutillas frescas con un toque de miel puede ser una opción económica y sabrosa.
Otra alternativa es preparar un guiso de verduras de estación, utilizando zapallitos, zanahorias y cebollas, que puede ser acompañado de un arroz integral o quínoa, aportando un balance nutricional adecuado y manteniendo bajo el costo del plato. Este tipo de preparaciones permite maximizar el uso de productos locales y reducir el desperdicio de alimentos.
Impacto en la canasta básica
Incorporar frutas y verduras de estación en la dieta diaria tiene un impacto positivo directo en la economía del hogar. Estos productos, al ser más abundantes en su temporada, suelen tener precios más bajos, lo que contribuye a reducir el costo total de la canasta básica alimentaria. Además, al optar por alimentos frescos y de origen local, se evitan los sobrecostos asociados al transporte y almacenamiento de productos importados o fuera de estación, haciendo más accesible una dieta balanceada para las familias jujeñas.
Más allá del ahorro inmediato, consumir productos de estación también tiene beneficios a largo plazo. Al apoyar a los productores locales, se fortalece la economía regional y se promueve la sostenibilidad ambiental, ya que se reduce la huella de carbono asociada al transporte de alimentos. Asimismo, una dieta basada en frutas y verduras frescas contribuye a mejorar la salud general, previniendo enfermedades crónicas y promoviendo el bienestar.